Autor: Stieg Larsson
Año: 2005
Editorial: Destino.
ISBN: 978-9974-643-78-9
N° de páginas: 665
Género: Thriller. Misterio. Suspense. Novela. Contemporánea sueca. Narrativa.
Sinopsis: Harriet Vanger desapareció hace treinta y seis grandes en una isla sueca propiedad de su poderosa familia. A pesar del despliegue policial, no se encontró ni rastro de la muchacha. ¿Se escapó? ¿Fue secuestrada? ¿Asesinada? El caso está cerrado y los detalles olvidados. Pero su tío Henrik Vanger, un ampresario retirado, vive obsesionado con resolver el misterio antes de morir. En las paredes de su estudio cuelgan cuarenta y tres flores secas enmarcadas. Las primeras siete fueron regalos de su sobrina; las otras llegaron puntualmente para su cumpleaños, de forma anónima, desde que Harriet desapareció. Mikael Blomkvist acepta el extraño encargo de Vanger de retomar la búsqueda de su sobrina. Periodista de investigación y alma de la revista Millennium, dedicada a sacar a la luz los trapos sucioes de la política y las finanzas, Blomkvist está vigilado y encausado por una querella por difamación y calumnia presentada por un gran grupo industrial que amenaza con arruinar su carrera y su reputación. Contará con la colaboración inesperada de Lisbeth Salander, una peculiar investigadora privada, socialmente inadaptada, tatuada y llena de piercings, y con extraordinarias e insólitas cualidades.
Así empieza esta magnífica novela que es la crónica de los conflictos de una familia, un fascinante fresco del crimen y del castigo, de perversiones sexuales y financieros; un entramado violento y amenazante en el que, no obstante, crecerá una tierna y frágil historia de amor entre dos personajes absolutamente inolvidables.
Hace unos días decidí releer mi novela favorita, sí, “Los hombres que no amaban a las mujeres” (obvio) y realmente debo reconocer que ya desde joven era una muchacha muy inteligente (perdón) porque supe reconocer a la mejor novela que se puede haberse escrito. Recuerdo que la primera vez que leí esta novela fue en el 2009, yo tenía más o menos 17 años, lo devoré en 2 días y quedé totalmente maravillada con esta novela, con la historia, con los temas que se tratan y con los increíbles personajes que vieron la luz del mundo por primera vez. Siete años después puedo asegurar que los recuerdos que tenía de esta novela no eran para nada superfluos y volvió a maravillarme, a fascinarme y a dejarme sin palabras una vez más. Tenía muchas ganas de volver a leerla, siempre que me preguntan cuál es mi novela favorito digo que es ésta, y es una de las reseñas que más he esperado y querido escribir.
Primero que nada, el estilo narrativo de Larsson es genial, me encanta la forma en la que escribió esta historia, y las demás de la trilogía; realmente es una forma muy clara, perfecta para el género thriller de misterio, ya que su estilo acompaña perfectamente al ritmo de la novela, al modo de ir sucediendo los acontecimientos, la forma de irse desvelando la resolución de los misterios. Debo decirles que cuando uno comienza a leer la novela, las páginas comienzan a volar por los dedos y uno no es capaz de detenerlas; nunca había leído una novela tan larga en tan poco tiempo, y es que uno, como lector, no puede dejar de leer, uno simplemente quiere saber más, más y más. Así que, desde el punto de vista narrativo, no hay ningún problema ni impedimento para dejar de leerla.
Por otro lado, debido a que el autor era un periodista de investigación, podemos ver reflejado ello en los temas que se tratan en la novela y en la forma en que lo hace.
La historia principal, que hace que la novela se ponga en marcha, es la investigación de la desaparición de Harriet Vanger ocurrida hace 37 años. Esta investigación lleva a Blomkvist a llevar sus dotes periodísticos y de investigación al máximo, y otorgándole a la investigación nuevos ojos en una nueva época, debe remontarse a datos históricos al siglo XIX, a rever las investigaciones policiales del pasado, a conocer a cada uno de los integrantes de la numerosa familia Vanger (una verdadera saga familiar), a sospechar de todos, e incluso a enfrentarse a sí mismo y a reinventarse. El proceso de investigación me pareció de lo más interesante ya que refleja fielmente la búsqueda a la vieja usanza, a través de archivos físicos interminables, miles de fotografías, trasladándose de un lugar a otro, preguntando por aquí y por allá, y recurriendo a la lógica y a la imaginación de vez en cuando. Creo que, a través de ello, se logra transmitir perfectamente el proceso de investigación, el tiempo que consume, el desgaste físico y mental, el hecho de sentir que nos encontramos en medio de un laberinto muy grande, del cual se nos hace muy difícil escapar, pero a la misma vez tiene un efecto obsesivo/adictivo que lo genera en quien investiga y en quien lee.
Sobre la historia central, además, debo destacar que la saga familiar Vanger constituye una historia aparte al igual que la historia de cada uno de sus personajes. Es una familia bastante numerosa, bastante antigua y cuyos integrantes se caracterizan por tener caracteres muy fuertes y definidos, ser excéntricos y no tener pelos en la lengua, lo cual lleva a que entre ellos exista una constante pugna de intereses, ya sea desde el punto de vista financiero, político y personal. Dentro de esta saga nos vamos a encontrar con muchos temas interesantes como la propia genealogía, la carga de la tradición y la identidad familiar, la huella del fascismo en Suecia (tema muy investigado por el autor), la violencia de género, el alcoholismo, el incesto, la religión, la decadencia, el hermetismo familiar, la superación, la vergüenza, el misterio, entre otros.
La segunda historia es secundaria y se trata sobre una de las historias que le tocó escribir a Blomkvist en forma de denuncia a un exitoso empresario, y la cual ha tenido un profundo efecto sobre el periodista. He escuchado por ahí que a algunas personas no les ha gustado esta parte, y personalmente me ha encantado y creo que tiene mucho contenido, y nos muestra la capacidad que tiene el autor de realizar algo grande a pesar de ser secundario. En esta segunda historia también se refleja mucho sobre la personalidad, los intereses y el trabajo del autor en la vida real. Se trata de una crítica bastante interesante y realista sobre esa parte de la economía tan inestable, tan brumosa, tan desconocida y desleal como lo es la especulación bursátil; sobre los caminos de la corrupción, la ilegalidad, la riqueza sin responsabilidad, la desigualdad social y el desequilibrio de riquezas en el mundo. [Como respuesta a quien no le gusta esta parte: ¿cómo no te puede gustar esta parte tan interesante, tan realista, tan actual en cualquier época de nuestro mundo, tan crítica, tan profunda…?] Además es una parte a través de la cual logramos conocer aún más al personaje de Blomkvist, superamos al periodista mujeriego y nos encontramos con un periodista dedicado, sumamente crítico, fiel a sus principios, sumamente objetivo, capaz de remover cielo y tierra por conocer la verdad y las verdaderas consecuencias de la situación fáctica; y los lectores que no estábamos seguros sobre la personalidad de Blomkvist terminamos queriéndolo mucho y agradeciendo al autor la creación de este personaje tan parecido a él mismo.
En cuanto a los personajes, ya adelanté que tenemos a Mikael Blomkvist, a Lisbeth Salander, a Henrik Vanger, a Martin y Harriet Vanger entre otros.
Creo que sobre Blomkvist ya mencioné lo suficiente, sólo puedo redondear que es un personaje estupendo pero con quien por momentos no logramos congeniar, pero que profesionalmente y, más al final de la novela, personalmente entendemos qué es lo que mueve a la persona de Blomkvist y reivindicamos nuestra opinión sobre el mismo.
Luego tenemos al misterioso y obsesionado Henrik Vanger, personaje multifacético, capaz de incursionar en cualquier área en la que tenga oportunidad, sagaz empresario, responsable de un bagaje familiar y con una capacidad de convencimiento muy importante. En general, todos los personajes integrantes de la familia Vanger son muy interesantes, pero tal vez Henrik sea el que más apariciones tiene junto a la desaparecida Harriet a través de sus diarios, fotografías y recuerdo por parte de otros personajes.
Pero, tal vez, mi personaje preferido de todo el mundo, un personaje que amé desde el momento en que la conocí, y el personaje más conocido es el de Lisbeth Salander. En general no es un personaje que tenga muchas apariciones, a pesar de su importancia y su fama, pero son apariciones tan contundentes, tan firmes y características de ella, que uno sólo puede dejarse llevar por su personalidad y sentir una profunda admiración por ella. Es un personaje que sabe quién es, sabe hacerle frente al mundo y no se deja incomodar por nada; es un personaje que va en contra de viento y marea, que lucha, que no se rinde, práctica, con memoria fotográfica, sumamente inteligente, totalmente sorprendente a cada momento y que se rige bajo un código moral ideal y, por momentos, dudoso, pero infalible. En fin, de esos personajes que uno querría conocer en la vida real. A veces pienso que un mundo al estilo de Lisbeth sería un mundo bastante mejor.
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